A raíz de la pandemia, cerca de cuatro millones de personas se han visto afectadas en nuestro país por un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), lo que ha originado muchos expedientes administrativos con errores. Uno de ellos es el que afecta a la cantidad que se ha cobrado por la prestación, y que en algunos casos es superior a la que nos corresponde. Si es ese tu caso, en Gi Group queremos darte las claves para que sepas cómo hay que devolver el dinero antes de que puedan imponerte una sanción.

Si eres uno de los trabajadores que se ha visto afectado por un ERTE es posible que hayas recibido una carta del SEPE informándote de un fallo en el pago de tu prestación. En la situación delicada y desconocida que estamos viviendo, se han producido momentos de confusión, donde es normal que hayan surgido equivocaciones que ahora mismo están empezando a salir a la luz.

En primer lugar hay que tener en cuenta que el error puede venir ocasionado tanto por un mal cálculo de la base reguladora, como por la no comunicación de la empresa de que el trabajador ya está de nuevo de alta.

Es probable que el SEPE tarde un tiempo en darse cuenta del error, pero también puede darse la circunstancia de que seamos nosotros los que detectemos el fallo. ¿Qué hacer en ambos casos?

 

¿Qué hago si he vuelto al trabajo, pero me siguen pagando el ERTE?

Se está dando con bastante asiduidad este caso, dado que en estos casos y por el motivo que sea el SEPE no ha tramitado la baja, y por lo tanto los empleados están recibiendo las prestaciones igualmente.

En este caso lo más recomendable es no gastar ese dinero, dado que lo normal es que el SEPE posteriormente nos reclame la devolución del mismo mediante un requerimiento.

 

En el caso de haber recibido una comunicación donde se nos indica que las cantidades cobradas no son las correctas, el SEPE nos pedirá que se las devolvamos a través del ingreso en un número de cuenta y el envío posterior del justificante a una dirección de email; pero en el caso de no estar de acuerdo, disponemos de un plazo de 10 días hábiles para presentar la correspondiente reclamación.

A partir de esos 10 días, el SEPE inicia los trámites correspondientes y empiezan a contar los 30 días hábiles en los que tendremos que hacer frente a la devolución de las cantidades solicitadas, ya que, de no hacerlo, nos podrán reclamar un recargo de un 20%.

Como es posible que todo esto nos pille por sorpresa, puede ser que no dispongamos del dinero en el momento y necesitemos solicitar un aplazamiento de la deuda. Una opción que nos facilitan, ya que tenemos la posibilidad de pagar la deuda en el plazo de 5 años, haciendo frente también a los intereses correspondientes, y justificando debidamente las causas.