El liderazgo femenino empieza a ser una realidad en las empresas y, aunque parte del éxito pasa por la ambición y la confianza en que “nosotras también podemos”, la corresponsabilidad en los distintos ámbitos y la flexibilidad laboral para ambos sexos siguen siendo tareas pendientes de nuestra sociedad. Estas han sido solo una muestra de las conclusiones de la jornada empresarial “El liderazgo de la mujer en la empresa y organizaciones” organizada por la revista Economía 3, en colaboración con Gi Group, BBVA y PWC.
Mayte Micó, Regional Manager de Gi Group en las zonas de levante y sur, ha sido la encargada de representar a Gi Group en esta jornada, donde ha presentado el liderazgo femenino en empresas y organizaciones desde la perspectiva de los Recursos Humanos.
Nuestra directora regional ha expuesto que en Gi Group casi el 80% de la plantilla está compuesta por mujeres. Tratándose de una empresa de RRHH, Mayte Micó ha relacionado este reparto de poncentajes con las aptitudes de las mujeres, en general, para tratar con las personas. “Según leí en un artículo hace poco, las mujeres estamos más preparadas para la gestión, tenemos más empatía, más inteligencia emocional y una mayor habilidad para lidiar y fomentar el diálogo”, ha explicado.
Durante la ponencia, nuestra responsable regional también ha insistido en la importancia de querer y creer que se puede. “Es importante conocer nuestras capacidades y combinarlas con un modelo de gestión work-life balance”.
El camino hacia la igualdad
Por otra parte, Mayte ha enumerado las razones por las que todavía queda camino por recorrer en la lucha por la igualdad. En primer lugar, los estereotipos y los roles de género siguen siendo un lastre. “Estamos entrando en un futuro tecnológico y hay que conseguir que las mujeres no nos quedemos fuera, la tecnología no entiende de sexos”.
En segundo lugar, hay que considerar la aplicación y los efectos de las políticas por la paridad. “No queremos mujeres en los altos cargos para cumplir con las políticas, sino para liderar”, ha declarado.
En tercer lugar, la directora regional ha reiterado que “la barrera, en muchos casos, somo nosotras mismas, y para avanzar tenemos que clarificar nuestras expectativas y definir nuestros objetivos sin limitaciones que nos condicionen”.
Por último, es imprescindible revisar los efectos de las medidas de conciliación, porque “según un estudio, el 40% del colectivo empresarial las considera un arma de doble filo, ya que en la práctica la mujer sigue renunciando a parte de su vida laboral por la familiar sin que la otra parte se tenga que implicar”.
Por último, Mayte Micó ha puesto sobre la mesa que la diversidad en las compañías las hace grandes y que “la paridad entre hombres y mujeres es decisiva para los resultados globales”.
En esta interesante sesión, que ha contado con más de un centena de asistentes y doce ponentes, se han planteado cuestiones como si de verdad existe el liderazgo femenino más allá de la teoría, qué aptitudes tienen las mujeres líderes o cómo evolucionará la convergencia de este enfoque con las nuevas generaciones.