Estamos cerca de finalizar el año 2020 y ya nadie se sorprende ante lo que nos pueda deparar el futuro. La aparición del Covid-19 ha provocado infinidad de cambios en nuestras vidas que dificultan el que podamos recordar como era todo antes de la pandemia. Entre las transformaciones más significativas, podemos destacar la experimentada por el mercado laboral, donde el teletrabajo se ha impuesto este año como la forma de trabajo por excelencia. En Gi Group hemos querido analizar el reciente informe “The Future of Jobs 2020”, donde la recesión y la automatización destacan como los aspectos que más van a cambiar nuestro mercado laboral.

Hablar del futuro es hablar de incertidumbre, una palabra que ha estado muy presente desde que el Covid-19 empezara a sonar con fuerza en nuestro día a día. Con su llegada, se ha podido constatar cómo el mercado laboral está cambiando más rápido de lo previsto, y está obligando a las empresas a tomar decisiones rápidas que garanticen su viabilidad.
Según el informe del World Economic Forum, la fuerza laboral se está automatizando demasiado rápido, lo que terminará con cerca de 85 millones de puestos de trabajo en los próximos cinco años. Pero, y a pesar de que la cifra asusta, también se desprende del estudio que la revolución robótica creará 97 millones de nuevos empleos.

Partiendo de estas premisas, es normal que tanto las compañías como los profesionales necesiten reinventarse; el 43% de las empresas encuestadas para la elaboración de este informe, afirman estar dispuestas a reducir su fuerza laboral debido a la integración de la tecnología, el 41% tiene previsto ampliar el uso de personal externo para trabajos especializados, mientras que otro 34% indica que sí que tienen previsto ampliar su plantilla.

De la misma manera, se estima que para el año 2025 los empresarios repartirán a partes iguales el trabajo entre personas y máquinas, estimándose que, en el caso de aquellos trabajadores que se mantengan en su puesto de trabajo en los próximos cinco años, casi el 50 % necesitará formación para mejorar sus competencias.

Relacionado con esto, es importante destacar como la mayoría de los empresarios consultados reconocen el valor de formar a sus trabajadores, esperando cerca del 66 % conseguir resultados positivos a la hora de mejorar sus habilidades. En definitiva, aquellas compañías que inviertan en capital humano serán las más competitivas.

Otro de los aspectos negativos que ha traído la pandemia es el de haber potenciado las desigualdades ya existentes, lo que obligará tanto al sector público como al privado a adoptar medidas que garanticen que esas brechas se identifiquen y se cierren cuanto antes. Un esfuerzo que pasa por crear incentivos para las inversiones en los mercados y en los empleos del futuro, así como en mejorar los sistemas educativos, entre otras cosas.

Por último, es importante reseñar como el teletrabajo se plantea como una modalidad laboral que ha venido para quedarse, a pesar de que necesite un proceso de adaptación. Según el estudio, el 84 % de los empresarios están preparados para digitalizar los procesos del trabajo, tratando de resolver los posibles problemas de productividad o de bienestar, implementado medidas que busquen crear un sentimiento de pertenencia de los empleados con la compañía.

En definitiva, el mundo está cambiando y el mercado laboral no podía quedarse al margen, lo que nos demuestra que hoy en día solo sobrevive el que mejor sepa adaptarse a todo lo que viene y a lo que aún está por llegar.

Puedes descargarte el informe completo «The Future of Jobs Report 2020» publicado por World Economic Forum aquí.